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Para muchos dominicanos los asaltos se han convertido en algo cotidiano de su vida. En varios vecindarios del pa\u00eds personas escuchan recuentos de c\u00f3mo despojaron a un vecino de sus pertenencias, si no son ellos mismos que son las v\u00edctimas del crimen.<\/p>\n
Sin embargo, para dos comunidades del Distrito Nacional esta frase es especialmente cierta: Villa Mar\u00eda y Ensanche Espaillat.<\/p>\n
As\u00ed se constat\u00f3 en un recorrido realizado por periodistas de este medio el pasado s\u00e1bado por ambas localidades, donde residentes compartieron historias de atracos recientes.<\/p>\n
Uno de los relatos ocurri\u00f3 en Villa Mar\u00eda ese mismo d\u00eda, pocas horas antes del mediod\u00eda. Magaly se dirig\u00eda a su casa, cuando un hombre a bordo de una motocicleta le arrebat\u00f3 su cartera repentinamente, a plena luz y frente a decenas de testigos.<\/p>\n
\u201cMagaly estaba parada en la esquina, esperando para cruzar la calle. El tipo andaba en un motor, y se le puso cerca. Entonces el tipo aceler\u00f3 par de veces y en menos de un segundo la atrac\u00f3\u201d, describi\u00f3 uno de los testigos.<\/p>\n
Esta modalidad es algo usual en la zona, de acuerdo con Ram\u00f3n de Jes\u00fas Torres, quien reside en lo referido barrio.<\/p>\n
Torres asegur\u00f3 que la gran mayor\u00eda de los asaltos que ha visto o le han contado tienen ese com\u00fan denominador: el perpetrador se desplaza en motocicleta. No obstante, afirm\u00f3 que rara vez es v\u00edctima un habitante del lugar, sino que tienden a ser objetivo quienes no residen all\u00ed.<\/p>\n
Bater\u00edas<\/strong><\/p>\n En Villa Mar\u00eda se ha popularizado otro tipo de hurto, las bater\u00edas de veh\u00edculos.<\/p>\n La situaci\u00f3n ha llegado al punto de que los propietarios de autom\u00f3viles del lugar se han visto en la necesidad de reforzar la seguridad de su bater\u00eda, poni\u00e9ndolas bajo llave y candado, en una especie de jaula de acero.<\/p>\n Y, en caso de que no puedan costearse esta medida de seguridad, pues simplemente optan por amanecer vigilando su carro o yipeta desde su hogar, turn\u00e1ndose con familiares para poder dormir las horas que necesiten.<\/p>\n \u201cYo he amanecido (vigilando), s\u00ed. Con mi machete en la mano por si acaso\u201d, dijo uno de los residentes, quien no quiso ser identificado.<\/p>\n Otros, como Carlos, se decantan por armar un esc\u00e1ndalo, gritando desde su casa o haciendo ruido de otra forma, a fin de espantar al criminal, al mismo tiempo de alertar a sus vecinos de la presencia del delincuente.<\/p>\n Tambi\u00e9n con armas de fuego<\/strong><\/p>\n El martes de esta semana una barber\u00eda, ubicada en la intersecci\u00f3n de las calles Federico Berm\u00fadez con Padre Castellanos de Villa Mar\u00eda, fue el escenario de un asalto con arma de fuego.<\/p>\n \u201cLlegaron sorpresivamente y nos enca\u00f1onaron. A m\u00ed me dieron un golpe en el hombro y le pegaron un tiro a otro compa\u00f1ero, que le pas\u00f3 de lado a lado. Gracias a Dios no le peligr\u00f3 ning\u00fan \u00f3rgano\u201d, narr\u00f3 Jorge Luis D\u00edaz, una de las v\u00edctimas, quien a\u00f1adi\u00f3 que solo le llevaron sus documentos de identificaci\u00f3n.<\/p>\n Igualmente asever\u00f3 que por la r\u00e1pida naturaleza del crimen, los asaltantes no tuvieron tiempo de llevarse el dinero de la barber\u00eda u otros objetos del valor.<\/p>\n Ensanche Espaillat<\/strong><\/p>\n Similar a la situaci\u00f3n que se vive en Villa Mar\u00eda, residentes de Ensanche Espaillat tambi\u00e9n denunciaron en repetidas ocasiones el bajo nivel de patrullaje policial, as\u00ed como un alto \u00edndice de asaltos.<\/p>\n \u201cAqu\u00ed nadie puede ni sentarse al frente de su casa a coger un ch\u00edn de brisa\u201d, exclam\u00f3 airadamente una se\u00f1ora local, llamada Altagracia Veloz.<\/p>\n Explic\u00f3 que los atracos \u201cest\u00e1n a la orden del d\u00eda\u201d, procediendo a contar como unos delincuentes se les acercaron a ella y a su hermana frente a su hogar, portando armas \u201cm\u00e1s grandes que las que llevan los polic\u00edas\u201d.<\/p>\n Veloz asegur\u00f3 que los j\u00f3venes las abordaron con intenci\u00f3n de despojarla de sus celulares, pero al percatarse que las se\u00f1oras no ten\u00edan siguieron su camino, dej\u00e1ndolas f\u00edsicamente ilesas, pero bastante intranquilas.<\/p>\n<\/p><\/div>\n